EL MANIERISMO

En su apogeo, el estilo renacentista era ya artificioso en muchos aspectos, sobre todo en su tendencia a exagerar la elegancia, en su idealización del cuerpo humano y en el gusto por posturas afectadas. Los grandes artistas desarrollaron un estilo personal, o al menos eso parecía. La búsqueda de originalidad en el estilo se convirtió en un fin en sí mismo en esta fase artística llamada manierismo (de maniera, en italiano "estilo").

Hacia 1520 las condiciones artísticas de Roma era ideales para el desarrollo del manierismo. Un grupo de jóvenes artistas discípulos de Rafael, como  Giovan Battista de Jacopo, apodado Rosso Fiorentino (1495-1540); Benvenuto Cellini (1500-71),y  Francesco Mazzola, el Parmigianino (1503-40), se vieron impelidos a manifestaciones de virtuosismo por su propia situación competitiva, por las características de las últimas obras de Rafael (m. 1520) y por la creciente influencia de Miguel Ángel(1475-1564). Los dibujos de este último eran sumamente originales, su escultura elegante y desligada de lo natural, y su arquitectura cada vez mas marcada por la libertad que por la norma. La dispersión del grupo tuvo lugar antes del saqueo de Roma en 1527, pero este acontecimien1to influyó directamente en la difusión del manierismo a través de Pierino del Vaga (h.1500-47) en Génova, del Parmigianino  en Emilia y de Rosso Fiorentino en Fontainebleu. Además, el estilo manierista se difundió de forma extraordinaria gracias a los grabados.

Características del manierismo 

El virtuosismo no era la única cualidad estilística que se consideraba digna de cultivarse. La innovación, la libertad de expresión, la variedad y el gusto por lo esotérico se apreciaban en el siglo XVI como nunca antes se había hecho, y así lo testimonian los escritos de Giorgio Varasi (1511-74), pintor y critico de arte. Se creía también que la demostración de talento artístico era un fin licito en una obra de arte, ya que podría convertirse en el autentico tema de la obra. Era importante que el manierismo, como estilo tardío del Renacimiento, se justificara mediante una interpretación selectiva de los autores de la antigüedad.

En el aspecto formal, las obras manieristas se caracterizaron por el descentramiento, la desarticulación de la unidad espacial, la pérdida de relación lógica entre lo principal y lo secundario, el uso de colores disonantes, las exageraciones y las desproporciones.

• Las pinturas y esculturas del manierismo se caracterizan por su artificialidad. No hay relación directa entre lo representado y el modelo natural.

• Se representan cuerpos y formas torsionadas, generando un movimiento espiralado denominado serpentinato. Las anatomías se deforman y alargan.

• Se abandona la coherencia espacial: es difícil determinar cuál es el espacio donde se ubican los personajes y las relaciones espaciales entre ellos.

 

Centros manieristas

Los centros del manierismo en Europa Central fueron esencialmente las cortes: la escuela mas relevante fue la de Fontainebleau. La decoración del nuevo palacio de Francisco I en Fontainebleau ejerció gran influencia en otros países. Los artistas principales eran italianos (Rosso y Primaticcio), siendo su obra mas importante la galería de Francisco I, mezcla exuberante de pinturas alegóricas, estilizadas y complejos relieves de estuco. Allí apareció por primera vez a escala colosal el elemento característico de la decoración manierista: la lencería (motivos ornamentales imitando cintas). Hacia 1600, los últimos centro activos del manierismo se encontraban en Holanda (escuela de Haarlem) y en la corte del Rodolfo II en Praga, donde trabajaron el pintor flamenco Bartholomaus Spranger (1546-1611) y el escultor holandés Adriaen de Vries (h.1548-1626).

• Detalle de la galería Francisco I (1535-39) en el Palacio de Fontainebleau. El fresco, sin duda uno de los realizados por la mano de Rosso Florentino, representa a " Venus llorando la muerte de Adonis", que tal vez alude a la muerte del delfín en 1536.

• El "rapto de las sabinas" (1582), obra de Giambologna, fue esculpida, al parecer, sin que el artista tuviese previsto un tema, un lugar o un encargo, sino solo con la pretensión de mostrar al mundo que, en contra de los rumores, era capaz de trabajar el mármol a escala colosal al igual que los bronces de pequeñas dimensiones. Giambola creía que hacía su tarea lo mas difícil posible multiplicando sus figuras y variando edades y sexos. Una vez concluida la obra se le asignó un título.

Las obras esculpidas durante esta época destacan por la forma serpentina, ya que las figuras muestran posiciones que recuerdan a una «S» o al movimiento de las serpientes. Este tipo de formas dotan de movimiento a las esculturas, además, solían dotarlas con cierto aire de monumentalidad y de dramatismo idealizado.

• "Venus y Adonis" (h.1590), obra de Bartholomaus Spranger, refleja el gusto típico de Rodolfo II y su corte de Praga, donde había una predilección poco común por todo lo raro e insólito. Spranger, artista cosmopolita, formado en Amberes, Paris, Parma y Roma, ejerció gran influencia en las ultimas fases del estilo manierista a través de su grabador Goltzius. Colorista sorprendente expresa un erotismo refinado mediante el contraste de las actitudes de sus figuras, de extraña y sutil sexualidad.

• La "Virgen del cuello largo" (h.1535) de Parmigianino, es una de las pinturas mas célebres del artista. El estilo subjetivista se manifiesta en el contraste entre la figura de la Virgen, concebida como figura serpentina alargada, y el diminuto profeta en la parte inferior de la composición. La inmensa columna del fondo, sobre la que se refleja la luz, es un ejemplo de la pureza formal que infunde también el artista a sus figuras. El tema es comparable al de un retablo de Corregio (h.1494-1534), pero aquí el refinamiento supera la expresividad. 

También se puede encontrar el manierismo en la literatura y la arquitectura.
Algunos de sus principales exponentes en la literatura fueron
Miguel de Cervantes Saavedra (1547-1616) y William Shakespeare (1564-1616):
En la arquitectura Giulio Pippi (Giulio Romano) (1499-1546) y Andrea di Pietro della Góndola (Andrea Palladio) (1508- 1580).

Bibliografía: El Arte, Salvat.